Radical Learning

¡No! Si quieres utilizar esta herramienta para lograr que otra persona haga lo que tú quieres, NO es el curso para ti. En la Comunicación Compasiva se trata de desarrollar comprensión y empatía para el otro, y una voluntad para lograr acuerdos donde la interacción pasa a través del consentimiento y no la coerción u otro tipo de manipulación.

La verdad es que no lo sé. Dependerá de qué tan comprometid@ eres en tu práctica. Pero te puedo compartir qué ha mejorado en mí:

Tengo un mejor entendimiento hacia mí misma: lo que siento y lo que necesito. Al entenderme mejor ya no soy tan enjuiciadora hacia mí, y eso me lleva a ya no juzgar tanto a los demás. He mejorado de mucho mi autocontrol. Soy más comprensiva hacia las necesidades de los demás. Tengo más entendimiento y compasión hacia las reacciones, palabras y actos de otras personas. He mejorado mi capacidad de entender lo que realmente está pasando en una persona. Doy más espacio para que otros se expresen. Me expreso con más claridad. Me he vuelto más clara en poner límites. Tengo menos conflictos en mi vida. Mis relaciones han mejorado de mucho. …y tanto más, incluyendo una relación absolutamente maravillosa con mi hijo adolescente.

La Comunicación Compasiva es, más que otra cosa, una actitud y/o postura para poder entender dónde se encuentra emocionalmente otra persona. No significa que siempre sea fácil entender exactamente lo que pasa para el otro, pero si te comprometes a practicar y no te rindes con el tiempo desarrollarás tu empatía y tu capacidad de escucha. Una persona empática que sabe escuchar es una persona con la cual otros se sienten en seguridad. Se vuelve más fácil para otros acercarse, confiar y atreverse a mostrarse vulnerables en tu presencia. Y es ahí donde tú podrás más fácilmente volverte el apoyo que quieres ser y que necesitan tus hij@s (no el apoyo que TÚ crees que necesiten). Eso es el resultado de crear relaciones auténticas y equitativas.

¡Sí, por supuesto! Varios abuelos han tomado este curso y no sólo han logrado desarrollar una conexión más profunda con sus nietos. También han sanado relaciones rotas con sus hijos ya grandes y con otros miembros de la familia. Si tú piensas que nunca es demasiado tarde para aprender, no deberías vacilar ni un segundo en tomar este curso.